sábado, 20 de enero de 2007

Aviso para navegantes:


Sean verbo y silencio la misma cosa.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Usted es el que sopesa, así que me parece bien. Y todo trato es justo si es aceptado con ganas.

(Por casualidad, acabo de ver que ya podemos hacer comentarios. Me alegra. Que nos des la posibilidad del verbo hace que me sienta bienvenido).

Rober dijo...

amigo nán, tú siempre eres bienvenido. Si ante no habeis podido publicar entradas ha sido por una torpeza informática al configurar el blog. Un abrazo silencioso, compañero.

Rober dijo...

Por cierto Nán, ¿me podrías recomendar una buena traducción (si la hubiera) de Vladimir Holan al castellano?

Anónimo dijo...

pues en amediavoz.com tienes varios, como el que copio abajo en traducción de Clara Janés, lo que es una garantía. En Ediciones del Oriente y del Mediterráneo hay un libro que contiene dos títulos Una noche con Hamlet y Toscana. Al menos la presentación es de Clara J. (la hija del editor y poeta). Me parece una garantía.

En la Web de la editorial dicen de este libro:
Con ocasión del próximo Centenario del poeta checo, presentamos, en edición bilingüe, dos de sus poemarios fundamentales: Una noche con Hamlet, y Toscana. Del primero afirmó un crítico que era “la síntesis de la lírica y de la épica, de la reflexión y del drama, de la historia del presente, del canto y del lamento”. Del segundo, el propio autor afirmó que era “su último testamento”.

Solamente había leído dos o tres poemas en Internet (por algo que me llamó la atención). Si compras el libro y merece la pena, recomiéndanoslo y haznos de introductor de este poeta en El peso o en las Playas.


CUANDO LLUEVE EN DOMINGO

Cuando llueve en domingo y tú estás solo,
completamente solo,
abierto a todo, pero no llega ni el ladrón
y no llama a la puerta ni el borracho ni el enemigo;
cuando llueve en domingo mientras tú estás abandonado
y no comprendes cómo vivir sin cuerpo
y cómo no vivir puesto que tienes cuerpo;
cuando llueve en domingo y, solo, no eres más que tú,
¡no esperes ni hablar contigo mismo!
Entonces el ángel es el único que sabe
lo que hay encima de él,
entonces el diablo es el único que sabe
lo que hay debajo de él.

El libro sostenido, el poema al caer...

Versión de Clara Janés